La realización de ejercicios individuales y colectivos a partir de reglas comunes, permite experimentar y comprender los desafíos de la cuestión de cine. ¡A jugar!
Hacer entrar lo real en la ficción: filmar dos veces a un personaje que espera a otro, en dos lugares muy diferentes, estableciendo una interacción entre lo real y la ficción. El ejercicio ilumina cómo un actor, inmerso en medio de un lugar público, se convierte en un personaje.
Hablar mientras se hace algo: filmar a un personaje que le cuenta algo a otro, mientras realiza una acción que exige concentración y/o un dominio técnico. El ejercicio permite observar la forma en que el personaje se nutre de la realidad de los gestos efectuados por el actor.
Raccord de miradas sobre el mundo: filmar a un personaje que descubre un lugar por el cual deambula: primero por una serie de raccords de miradas, luego mostrando al personaje incluido en ese lugar. El ejercicio permite comprender cómo hacer que nazca una emoción, sin diálogo ni palabra, a partir de una simple observación de lo real.
Estos ejercicios invitan a dirigir una mirada particularmente atenta a un universo a menudo banalizado por lo cotidiano, a reaccionar a lo que se produce, a acoger lo imprevisto.